En otros artículos te he hablado de los tipos de yoga. Hay tantos que es casi imposible que no encuentres el que encaje mejor con tus necesidades. Sin embargo, después de todos mis años de práctica y de haber probado muchos tipos de yoga, hay uno al que le tengo especial cariño: el Dharma Yoga.
En 2016, tuve la oportunidad de realizar el Life of a Yogi Teacher Training en la ciudad de Nueva York de la mano del propio maestro Sri Dharma Mittra. Fue una aventura maravillosa y todo un reto del que podéis saber más en este artículo.
Es precisamente de este estilo del que me gustaría hablarte hoy.
Si te interesa saber más sobre estilos de yoga, puedes suscribirte a XLY Studio (mi plataforma de yoga y meditación online) y probar diferentes tipos. ¡Tenemos más de 10 estilos!
Origen del dharma yoga
El Dharma Yoga es un tipo de yoga contemporáneo basado en el principio de Ahimsa (no violencia) que busca que seamos benevolentes con nosotros mismos para poder serlo con los demás.
Fue creado en 1975 por Sri Dharma Mittra o Dharma-Ji (como es conocido por sus alumnos en señal de respeto) y proviene del Hatha-Raja Yoga, o lo que es lo mismo, un tipo de yoga basado en las 9 formas del yoga entre las que se incluyen: Raja, Kundalini, Bhakti, Mantra, Tantra, Yantra, Jnana, Karma y Hatha.
Según su propio creador es la combinación perfecta entre tradición y contemporaneidad. Es uno de los estilos más devocionales que hay en el yoga y cuando lo practicamos, el principal objetivo es la devoción o entrega a lo divino. De hecho, se podría decir que su práctica es como una oración en movimiento.
Quién es Dharma Mittra
Dharma Mittra es un maestro de yoga nacido en 1939 en Brasil que fue alumno de Swami Kailashananda, también conocido como Yogui Kupta, del cual aprendió las ya mencionadas 9 formas del yoga.
Empezó a interesarse por este mundo en su adolescencia guiado por su hermano menor que fue el que le animó a viajar a Nueva York con él y conocer al maestro Swami Kailashananda.
Actualmente, lleva más de 50 años enseñando yoga por todo el mundo y sigue con (casi) tanta vitalidad como el primer día. Quedé muy sorprendida cuando lo vi sobre la cabeza sin ningún otro apoyo.
Es en 1975 cuando decide abrir su propio centro El Dharma Yoga Center en Nueva York, convirtiéndose, hoy en día, en un lugar de referencia donde acuden cientos de personas a aprender del maestro.
Desde entonces, y como se especifica en su biografía, se dedica a: «(…) vivir su destino, una vida dedicada a compartir y difundir la verdad, el conocimiento y la luz de Dios a través del yoga de la manera más humilde y tranquila.»
Características Dharma Yoga
El Dharma Yoga es un estilo de yoga peculiar y fácil de reconocer. Cuenta con una serie de características que, para mí, lo hacen inconfundible:
Saludo al sol Dharma
Lo más característico de este estilo es el saludo al sol.
En otros estilos más populares como el Ashtanga Yoga, empezamos con el saludo al sol A (surya namaskar A), en el cual solemos saltar para ir hacia atrás y hacia delante.
Sin embargo, en Dharma Yoga, la secuencia es más pausada. Primero vamos atrás con el pie derecho, apoyamos rodilla y subimos los brazos en kapiasana. Luego se repite la secuencia con el pie izquierdo.
Se podría decir que el saludo al sol de Dharma yoga es más similar al saludo al sol que realizamos en Hatha Yoga (con la diferencia de que en Hatha Yoga no subimos los brazos en kapiasana), pero si quieres conocer bien las bases del saludo al sol y practicarlo conmigo, te invito a que eches un vistazo a este vídeo de Studio Online “Saludos al sol | Hatha y Dharma yoga”.
El uso de pranayamas
El Dharma Yoga tiene muy en cuenta los ejercicios de respiración (pranayama) y la meditación. Estos son considerados la combinación perfecta a la práctica de asanas ya que desestresan y bajan las pulsaciones llevándonos a un estado de paz y calma.
Las series en Dharma yoga
En Dharma Yoga no hay una secuencia fija y estructurada como ocurre en Ashtanga o en Rocket Yoga. El profesor te irá guiando en diferentes posturas de yoga.
Sin embargo, sí que se contemplan unas series que sirven para clasificar las clases según su nivel de exigencia: Dharma I y Dharma II para principiantes, Dharma III y Dharma IV para aquellos alumnos más aventajados y una quinta serie considerada como restaurativa en la que se practica mucho más los pranayamas y la meditación.
Las posturas invertidas
Si has practicado otros estilos de yoga, como el Vinyasa o el Ashtanga, verás que las posturas invertidas son consideradas posturas de cierre; en la primera serie de Ashtanga realizamos sirsasana al final de la clase.
Sin embargo, en Dharma Yoga las invertidas se realizan hacia la mitad de la clase, no se dejan para el final.
Las asanas de extensión
Por último, podría mencionar que el Dharma Yoga está repleto de extensiones y torsiones de pecho.
Al ser un estilo muy devocional basado en Ahimsa, hay un gran trabajo del cuarto chakra (anahata o chakra corazón) lo que es muy beneficioso para poder abrirnos, desbloquear emociones y dejar paso al amor por los demás y por nosotros mismos.
Posturas básica de Dharma yoga
Dharma Mittra crea un gráfico con 908 posturas de yoga como ofrenda a su Gurú sin saber que este gráfico que crea, con fotografías propias, es usado en muchos centros de yoga contemporáneos por todo el mundo. Sin embargo, hay 6 posturas que el maestro considera fundamentales; los cimientos sobre los que se crea el resto de la práctica. Estas son:
Padmasana (postura del loto)
Es una postura básica en la que nos encontramos sentados con las piernas cruzadas apoyando los pies sobre los muslos contrarios ーno debemos confundirla con sukhasana, también conocida como “postura sencilla” porque, aunque también estemos sentados con las piernas cruzadas, los pies no se encuentran sobre los muslosー. Esta postura requiere de cierta flexibilidad en la cadera por lo que puede resultar compleja para algunas personas. Si es tu caso, siempre puedes hacer medio loto o un cruce de piernas simple; así le vas dando espacio a tus caderas.
Este asana es usada, además, para la meditación y la práctica de pranayamas ya que nos ayuda a mantener la concentración, una mente atenta y la columna erguida.
Paschimottanasana (postura de la pinza)
Se trata de una flexión profunda hacia delante en la que intentamos llegar con nuestras manos a los pies. Si no es posible, siempre puedes flexionar las rodillas para crear más espacio y seguir proyectando hacia delante la columna.
En este asana damos un masaje a todos nuestros órganos internos por lo que nos ayuda si tenemos algún problema intestinal.
Bhujangasana (postura de la cobra)
Siempre que vayamos a realizar un saludo al sol vamos a realizar la cobra. Es importante que no la confundamos con urdhva mukha svanasana (perro que mira hacia arriba) ya que son dos asanas diferentes.
Debemos procurar no colapsar los hombros y llevarlos atrás y abajo manteniendo el pubis en contacto con el suelo y elongando la columna.
Sirsasana (inversión sobre la cabeza)
Las inversiones son muy usadas en este estilo y, como ya he mencionado, se usan a mitad de la clase y no al final.
El asana de inversión sobre la cabeza por excelencia es sirsasana. Puede que sea un asana muy avanzada para ti y aún no logres dominarla. No pasa nada, es cuestión de práctica. Te dejo un enlace a mi canal de YouTube donde te explico cómo conseguirla.
Sarvangasana (postura de la vela)
Se trata de otra postura invertida, pero esta vez nos mantenemos sobre los hombros.
Este asana es considerado rejuvenecedor ya que, favorece al sistema endocrino y circulatorio de nuestro cuerpo.
Si quieres saber más sobre sarvangasana, te invito a que veas este tutorial.
Ardha matsyendrasana (torsión)
En Dharma Yoga las torsiones son muy usadas ya que hacen que nuestra columna se mantenga joven y flexible lo que tiene un efecto altamente beneficioso para nuestra salud en general.
La torsión masajea todos nuestros órganos internos haciendo que sangre renovada fluya por ellos y les ayude a realizar sus funciones correctamente.
Beneficios del Dharma yoga
Según el propio Dharma Mittra: «El Dharma Yoga nos ayuda a vigorizar el cuerpo y la mente llevándonos a un estado de flexibilidad, fuerza, equilibrio y concentración».
Aunque este estilo de yoga comparte múltiples beneficios con otros estilos de yoga, podríamos decir, según el maestro, que sus principales beneficios son:
- Equilibrio de la mente y los pensamientos. El yoga en general y el Dharma Yoga en particular, nos ayuda a estar más enfocados en nosotros mismos y en lo que ocurre en nuestro interior mientras practicamos.
- Mejora la concentración. Durante la práctica, hay otros factores que debemos tener en cuenta a parte de la correcta ejecución de las asanas como es la respiración y la correcta canalización de nuestra energía. Por lo tanto, es un buen ejercicio para entrenar nuestra concentración.
- Nos ayuda a conseguir un estado físico óptimo. Con el yoga no pretendemos conseguir un estado físico de revista sino más bien un estado de salud general que nos permita vivir con mayor bienestar.
- Desbloqueo de emociones. En Dharma Yoga hay muchas posturas de extensión de columna y de apertura de cadera. Esto se traduce en apertura de corazón y desbloqueo de emociones.
Clase online de Dharma yoga para principiantes
Si te ha llamado la atención este estilo de yoga, te invito a que lo practiques conmigo en el siguiente vídeo de YouTube.
Esta práctica de Dharma I paso a paso es para todos los niveles, así que te animo a que le eches un vistazo, la pruebes y me comentes qué tal te ha sentado.
Estilos de yoga
Si lees el blog o has visto algunos de mis vídeos, sabrás que hay muchos estilos de yoga diferentes así como diferentes escuelas.
Si no es tu caso y quieres saber más sobre otros tipos de yoga y conocer cuál podría encajar mejor contigo, puedes leer mi artículo “Tipos de yoga | ¿Sabes qué estilo de yoga encaja más contigo?”.
También te animo a que pruebes distintas variantes en XLY Studio. Gracias a los filtros por categorías, puedes elegir si practicar Vinyasa, Ashtanga, Hatha, yin yoga… Además de escoger la duración o el nivel de exigencia de la clase.
Las preferencias por estilos de yoga pueden cambiar y variar con el tiempo o por circunstancias de la vida, por ello está bien explorar y probar diferentes estilos.
Te deseo una buena práctica.
