Muchas veces me preguntan qué tipo de yoga enseño, su nombre tradicional es vinyasa yoga. Este estilo de yoga está inspirado por todas las influencias y escuelas con las cuales me he formado. Lo defino como un yoga dinámico que mueve el cuerpo con una respiración consciente. Recomiendo este estilo a cualquier persona que necesite desconectar de su rutina y reconectar consigo misma.

En este artículo, te explico más en detalle qué es el vinyasa yoga, como estilo y movimiento para el cuerpo. Y te hablo de sus beneficios tanto como practicante como en mi papel de profesora. Terminaré compartiendo unos vídeos para que puedas fluir en movimiento disfrutando de una práctica de vinyasa yoga desde casa.
Estilo dinámico de yoga
Vinyasa yoga es un nombre genérico para los estilos que incluyen secuencias dinámicas llamadas “vinyasa” que suelen ser guiadas con distintos niveles de dificultad.
Es un estilo de yoga en el que el practicante fluye y evoluciona al ritmo de la respiración. La práctica se convierte en una danza, ya que en cada inhalación y exhalación se crea un movimiento específico. A diferencia del hatha yoga, que es un estilo más pausado, el estilo vinyasa se caracteriza por mantener las asanas menos tiempo, enfocando la energía en la fluidez entre posturas para crear un movimiento dinámico.
Practiqué el ashtanga yoga estilo Mysore durante más de 10 años. Siguiendo las mismas series de asanas, en el mismo orden y con el mismo ritmo definido por Pattabhi Jois. En la autopráctica, he podido comprobar cómo entras en un estado meditativo en movimiento. Vives la sesión con atención plena y sostenida, ya que mantienes la atención en todo momento escuchando tu propia respiración sonora. Profundicé en el conocimiento del cuerpo y el control de la respiración con este método exigente que me permite, ahora, fluir con una variedad de asanas en vinyasa yoga de manera natural.
Pero como muchos profesores, mi práctica ha ido evolucionando. Y, hoy en día, me gusta variar los estilos de yoga dinámico, a través de las variantes del Vinyasa yoga como Jivamukti yoga y Dharma yoga.

Hice mi primera formación de profesores en vinyasa yoga y di mis primeras clases siguiendo las pautas de vinyasa yoga. La exigencia reside en poder enseñar las posturas, guiar, observar los alumnos y ajustar a la vez, sin perder de vista la secuencia de posturas preparada. Me gusta enseñar el vinyasa yoga porque me permite flexibilidad en las clases guiadas y no me siento limitada y obligada en la selección y orden de posturas. Puedo elegir entre hacer una clase completa que trabaja todo tipo de asanas, enfocarla a una postura cumbre, o bien convertirla en una clase más fluida, con muchas transiciones o más pausada.
¿Qué son las vinyasas?
Vinyasa es también la sincronización entre movimiento y respiración. Existe un patrón general para las vinyasas: normalmente se inhala al subir y se exhala al bajar. La inhalación nos llena de “prana” o energía vital y la exhalación nos llena de “apana”, una energía hacia abajo, que limpia.
En ashtanga yoga, por ejemplo, el sistema de vinyasa es la cuenta exacta de movimientos sincronizados con la respiración que hacemos en cada postura. Cuando practicas este estilo, cada movimiento está ligado a una inhalación o a una exhalación al entrar y salir de cada asana. Por ejemplo, el saludo al sol o Surya Namaskar A tiene un vinyasa de 9 y el Saludo al sol B tiene una vinyasa de 17.
De esta manera, todas las posturas o asanas tienen un número concreto de vinyasa. Lo más importante en este caso es conocer las vinyasas, así se podrá mantener el ritmo de la práctica. Pero en una práctica guiada, se podrían añadir algunas vinyasas para ayudar a los principiantes a entrar y salir de la postura de forma más cómoda. Algunas respiraciones se hacen sin movimiento, por lo que no se cuentan como vinyasas.
Otros estilos de yoga dinámicos pueden dejar un poco más de flexibilidad y se llama vinyasa también a las secuencias de movimientos (tipo saludo al sol) que unen las distintas asanas. En Dharma yoga, son vinyasa más pausados mientras que en otros estilos de yoga dinámicos, buscamos fluir a través del movimiento.
En mis clases, notarás que suelo enlazar las distintas posturas con un “vinyasa” usando principalmente dos opciones: una opción más dinámica estilo ashtanga yoga y una opción más tranquila, sin saltos.
Si no conoces estas transiciones “vinyasa”, te recomiendo este vídeo de Watch & Learn explicativo: Transiciones: pasos y saltos (10 min).
Si quieres introducirte en el vinyasa yoga y aprender los fundamentos del yoga dinámico, te recomiendo mi Programa Bases del Vinyasa yoga. Un curso online completo con secuencias, asanas, detalle de transiciones, meditación, ejercicios de respiración y relajación.
Beneficios del vinyasa yoga
Como profesora, este estilo de yoga me permite expresar mi creatividad a la hora de elegir mis secuencias. Y para ti, decirte que ¡no te vas a aburrir! Existen vinyasa más lenta o un poco más dinámica, para que el alumno fluya con energía.
El propósito del vinyasa es fluir y hacer una limpieza interna. La combinación de las asanas con el movimiento y la respiración hacen que la sangre circule alrededor de todas las articulaciones. El calor que se genera ayuda a eliminar impurezas que son expulsadas del cuerpo a través del sudor durante la práctica. Si la vinyasa se sigue correctamente el cuerpo llega a ser sano y fuerte.
Clase de vinyasa yoga online
Mis clases de vinyasa suelen empezar con posturas a gatas seguidas de posturas de pie, sentadas y finales. Puede ser una sesión que repasa las posturas básicas conocidas del hatha yoga con transiciones dinámicas que se llaman vinyasa, coordinando el movimiento con la respiración para crear una secuencia fluida. También me gusta, de vez en cuando, invitar otros estilos que he practicado como el ashtanga yoga o escuelas con las que me he formado, como el Jivamukti yoga o el Dharma yoga.Te recomiendo que tomes nota de estos consejos si quieres empezar a practicar yoga online.
Vinyasa yoga para principiantes
Si eres completamente nuevo en esta práctica de yoga, te recomendaría que leas este artículo de yoga para principiantes y empieces con unas clases de Hatha Yoga. Y, una vez que vayas cogiendo un poco de práctica, el vinyasa yoga te va a aportar también muchos beneficios. Lo ideal en mi experiencia es combinar los estilos y optar por uno u otro según tu estado anímico y físico cada día. Para los días en los que el cuerpo está más cansado, te recomiendo una sesión de restaurativo. Si necesitas dedicarte un tiempo para “aterrizar” o meditar sobre tus decisiones importantes, el hatha yoga será tu mejor aliado, mientras que, si necesitas soltar energía, el vinyasa yoga te dejará como nuevo.
El Vinyasa Yoga, con su fluidez y dinamismo, es ideal para aquellos que buscan una práctica física y mentalmente activa. Para quienes desean explorar otras disciplinas que integran el trabajo energético y espiritual, el Kundalini Yoga es una excelente opción. Este estilo trabaja profundamente en el despertar de la energía interna, brindando una experiencia de conexión profunda.
Si quieres practicar yoga online y experimentar varios estilos de yoga, prueba XLYStudio, mi plataforma de yoga y meditación. Hay una gran variedad de clases de vinyasa con diferentes niveles y duraciones. También podrás descubrir otros estilos y profesores.
¡Buena práctica!
Xuan Lan

Xuan Lan es instructora de yoga y meditación mindfulness. Tiene formación en Vinyasa (200 h), Jivamukti (75 h), Dharma yoga (200 h), Intensivo de Ashtanga (50 h) y Yoga para trauma (20 h). Además, también ha estudiado Gestión del estrés y Regulación Emocional con Mindfulness en la UOC (Universidad Oberta de Catalunya).
Es autora de 3 libros: "Mi diario de yoga", "Yoga para mi bienestar" y "La buena hija vietnamita".
Namasté!
Muchísimas gracias Xuan por compartir los beneficios, diferencias y recomendaciones de cada estilo de yoga.
Creo que Hatha yoga como tú bien dices es lo ideal para un practicante que se inicie en yoga, porque permite memorizar e integrar cada postura en el cuerpo, y además utilizar elementos para desarrollar tu capacidad y progresión dentro de ellas, así como también conocer tus limitaciones sobre todo si tienes lesiones.
En particular vengo de practicar Hatha y Hatha restaurativo unos años y pienso que es muy necesario escuchar al cuerpo cada día, saber cómo te encuentras física y mentalmente, como está tu energía y qué tipo de práctica te conviene para ese día en concreto.
Quería compartir que, para las mujeres, es muy interesante leer la obra de Geeta Iyengar y sus recomendaciones de posturas respetando el ciclo menstrual, que está muy asociado a la energía en nuestro caso.
He descubierto tus clases este año y me parecen muy completas, variadas y sobre todo muy didácticas.
Sólo quería de nuevo agradecer todo el tiempo que dedicas a transmitir tus conocimientos, a difundir el yoga como una filosofía cuerpo-mente-espiritu y no a nivel físico y deportivo, tu profesionalidad y sobre todo tu constancia y compromiso para con la gente que te sigue.
Un abrazo