Libera y disfruta

Posiblemente si estás en el hemisferio norte estás a punto de empezar las vacaciones de verano, el calor empieza a pesar y te sientes mentalmente y físicamente más cansado.  En el caso de estar en el hemisferio opuesto tus vacaciones quedan ya muy lejos y el cansancio también empieza a pesar.

Con frecuencia en nuestro día a día nos sobrecargamos de trabajo y de listas de tareas infinitas que no llegamos a cumplir.

Como dice el maestro Thich Nhat Hanh, un monje budista vietnamita que ha sido y sigue siendo una gran fuente de inspiración para mí: “Dejar ir nos da libertad y la libertad es la única condición para la felicidad.”

Recuerdo una vez cuando me perdieron la maleta en un vuelo, en un primer momento entré en crisis porque sentí que no podía continuar mi viaje sin todo lo que me había planeado llevar y luego con el paso de los días me di cuenta de que no necesitaba la mitad de las cosas que llevaba en mi maleta.  Tal vez en alguna ocasión has podido experimentar una situación similar a esta y te has dado cuenta de que aquello  que creías  indispensable no lo era tanto. Soltar y dejar, no sólo cosas materiales, pensamientos, sentimientos o personas puede que no siempre nos resulte fácil pero una vez lo logras puedes experimentar una sensación de ligereza y bienestar.

Libera el estrés

Como ya sabrás el estrés es uno de los causantes de mayor malestar en nuestra sociedad. Según la última encuesta realizada por Cigna para el estudio ‘COVID-19 Global Impact’, 8 de cada 10 personas en el mundo reconocen estar estresadas.

Librarse del estrés no siempre es fácil pero el yoga y el mindfulness pueden darte herramientas para aprender a gestionarlo.

De la unión del yoga y el mindfulness nace el mindful yoga. El mindful yoga te lleva a prestar atención al cuerpo y a las sensaciones corporales en las distintas asanas e incluye también todos aquellos pensamientos, estados de ánimo y emociones que experimentamos.  Jon Kabat-Zinn creador de la técnica de Reducción del Estrés Basada en la Atención Plena (MBSR) nos dice en este extracto traducido del artículo titulado «Mindful yoga, movement and meditation» que el mindful yoga consiste en una actitud específica y una disposición atenta que traemos a nuestra práctica, tanto en la esterilla como en nuestra vida diaria: esa capacidad elegante de prestar atención, momento a momento, sin juzgar, sin esfuerzo, a cada una de las experiencias que vivimos. Para reducir el estrés y mejorar la salud. Nos conduce a una sensación de bienestar, de eficiencia en el trabajo y de desarrollo espiritual continuo.

Y es que como ya he comentado en artículos anteriores la base el mindfulness es una palabra en inglés que significa “atención plena”. Poner atención en el momento presente nos permite ser conscientes de nuestro estado físico, emocional y mental. Y evita que nuestra mente se enzarce en pensamientos que no nos convienen proyectando el futuro o recordando cosas del pasado.

Aunque al inicio te parezca difícil te recomiendo que plantes esta semilla y confíes en que, con la práctica, esta actitud de mayor conciencia se irá instaurando en tu día a día.

Puedes empezar a practicarlo en esta clase.

Libera toxinas

El estado de nuestra mente también puede verse afectado por el nivel de toxinas de nuestro organismo, por eso es importante tomar conciencia y eliminarlas o regularlas.

En el hatha yoga se utilizan diferentes técnicas de limpieza que se conocen como Kriyas. Kriya significa “acciones que purifican”. Estas técnicas corporales y respiratorias ayudan a limpiar nuestro organismo y también nuestra mente. Algunas de ellas tal vez ya las hayas practicado en clase como es el caso de Kapalabhati (limpieza respiratoria) o Nauli (limpieza abdominal) que puedes poner en práctica por ejemplo en algunas torsiones o flexiones hacia delante donde hay una suave presión sobre los órganos internos.

También en los niyamas de Patanjali se habla de saucha, un concepto sánscrito que se refiere a la pureza y limpieza. Los yamas y niyamas son las bases de la filosofía yóguica y te ayudan a vivir la vida de forma más consciente. Los yamas hacen referencia a pautas a seguir con respecto a los demás y los niyamas a las actitudes hacia uno mismo.

Saucha no sólo hace referencia a la higiene personal sino también a la salud, la calma mental y a la intencionalidad de nuestras acciones.

Cuerpo y mente están íntimamente relacionados, por eso liberarnos de nuestras toxinas físicas también libera nuestra mente y nos ayuda a pensar con mayor claridad. Por ejemplo la serotonina, la hormona de la felicidad, que ayuda a regular nuestro estado de ánimo, tiene su origen en el aparato digestivo.

Beneficios del yoga a la hora de liberar toxinas:

• Estimula el hígado y ayudan a mejorar su funcionamiento.
• Activa la glándula tiroides.
• Equilibra el sistema nervioso simpático y parasimpático.
• Activa el calor interno en el sistema nervioso contribuyendo a reducir la grasa profunda y la superficial.
• Se logra un buen ritmo cardíaco
• Mejora la salud del intestino.

Además de todos los  beneficios generales que el yoga puede aportar en nuestra vida y de los que ya he hablado en muchas ocasiones, si quieres saber más te recomiendo leer este otro artículo Beneficios del yoga.

Realiza una práctica enfocada en las torsiones y practica Kapalabhati en esta segunda clase del propósito del mes.

Libera caderas

Otra de las partes del cuerpo donde solemos acumular muchas tensiones es en la cadera. El psoas, uno de los músculos que forma parte de la cavidad abdominal, se le conoce como el “músculo del alma”  porque  está conectado con el diafragma a través del tejido conectivo o fascia y se ve afectado tanto por la respiración, como por el miedo reflejo, contrayéndose con cualquier tipo de estrés.  Pero no sólo es el portavoz de las emociones negativas, también lo es de las positivas como “ las mariposas en la tripa”.

Además si las caderas están rígidas también se ve afectada nuestra postura corporal y cargamos otras zonas de cuerpo creando descompensaciones y esto puede afectar sobre todo a la columna y las rodillas. Por lo tanto, los ejercicios de apertura de cadera también pueden aliviar el dolor en la espalda y las rodillas.

A través de la práctica del yoga podemos mejorar la movilidad de nuestra cadera pero también podemos hacerlo con pequeños gestos cotidianos:

• Pasar menos tiempo sentado
• Flexionar la cadera y no la espalda baja.

Pero como ya hemos comentado los beneficios de movilizar la cadera no son solo físicos ya que como hemos visito músculo como el psoas están totalmente ligados a las emociones. Por lo tanto aquellas asanas enfocadas en la apertura de cadera también nos ayudarán a liberar el estrés y las emociones. De hecho el segundo chakra (Chakra Svadisthana) dónde se crean los sentimientos y la creatividad reside también en nuestras caderas.

Mobiliza las caderas y disfruta de esta tercera clase.

Libera tu respiración

La respiración es un reflejo de nuestro estado anímico, cuando estamos preocupados por algo nuestra respiración se agita y cuando estamos relajados nuestra respiración es mucho más pausada. Del mismo modo, nuestra respiración nos da muchas pistas durante la práctica y es fundamental en la práctica de las posturas (asanas). Por ejemplo si estamos excediendo nuestros límites y forzando, nuestra respiración también será entrecortada.

En la práctica del yoga se realizan una serie de técnicas de control de la respiración que se conocen como pranayama (prana: “respiración” y yama: “control”) de las que también he hablado anteriormente como en este artículo Pranayama: Beneficios, usos y práctica. A través de estas técnicas aprenderás a controlar tu respiración y a modificarla en función de lo que busques (pranayamas energizantes o relajantes)

Generalmente la respiración durante la práctica debe ser lenta, profunda y a través de nuestra fosas nasales. Observa también en tu vida cotidiana como tu respiración va cambiando y como te da pistas de tu estado anímico.

Puedes practicarlo en esta cuarta clase.

Libera tu mente

La mente a veces puede ser nuestro peor enemigo, por eso es tan importante detenerse a observar el modo en que nos hablamos y la calidad de nuestros pensamientos, tomando conciencia no solo durante los momentos de meditación.

Martin Seligman es considerado el padre de la psicología en positivo y estudió aquellos aspectos de nuestra conducta que nos hacen sentir más felices.  Después de su estudio destacó varios aspectos:

• Prestar atención a lo positivo.
• Sembrar actitudes positivas en nuestra rutina para crear hábitos y relaciones positivas.
• Reflexionar sobre nuestro propósito de vida que no es otro que ser felices y alcanzar el bienestar y además, creer que somos capaces de conseguirlo.

Pon en práctica este nuevo enfoque y siembra actitudes positivas con esta última clase.

“La felicidad auténtica tiene que ver con vivir una vida llena de agradecimiento”.

Martin Seligman

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Que disfrutes de tu práctica.

Namasté