Hace unos años, durante un viaje a Sicilia, descubrimos la tradicional pasta a alla norma con berenjenas, tomate y ricotta salata. La denominación de la pasta alla norma se debe al homenaje a Vinvenzo Bellini y su opera prima Norma. No sé si es un azar, pero mi marido es un aficionado a la ópera y a la pasta alla norma.
Lo ha cocinado varias veces, mejorando su receta. Podéis leer un post interesante de Lisi en su famoso blog de gastronomía In the Mood For Food.
Durante el fin de semana es un momento perfecto para dedicar tiempo a la cocina, y sin prisa. Regularmente, aprovecho la ocasión para pedir a mi marido que nos prepare una de sus recetas de pasta. Cuando estuvo viviendo en París, compartió un piso con un amigo italiano que le enseñó los trucos de la pasta a la italiana y admito que conozco a poca gente que sepa preparar la pasta como él.
Me encantan estos momentos caseros e íntimos, y no hace falta que sean muy sofisticados. Me parece que este plato de pasta sale mejor de gusto y lo disfruto aún más cuando es mi pareja que me lo prepara con amor y cariño. Disfruto mucho estos momento sencillos del día a día en familia/pareja. La vida en pareja se debe gestionar para privilegiar momentos de intimidad, compartir un actividad de ocio, un centro de interés o un deporte, tener una conversación que no sea de recados, trabajo o tareas de casa, etc. Cocinar juntos y disfrutar de una comida casera es para mi uno de estos momentos especiales.
Receta de pasta alla norma
Comparto con vosotros su receta de la pasta alla norma, es fácil de hacer pero requiere un poco de tiempo.
- Corta la berenjena en rodajas de 1 centímetro de ancho. Para quitar el amargo se puede espolvorear sal gorda sobre la berenjena y dejarla reposar por lo menos 30 minutos (pero se recomiendas hacerlo por 2 horas).
- Limpiar con agua la sal de las rodajas de berenjena y secarlas con toallas de papel.
- Una vez secas, freírlas en un sartén con aceite de oliva hasta que se tornen doradas.
- Sacar las berenjenas del sartén y quitar el exceso de aceite con toallas de papel. Cortarlas en tiras/juliana y reservar.
- Preparar una salsa de tomate simple. Calienta dos cucharadas de aceite de olvida en un sartén a fuego bajo-medio. Saltea el ajo hasta que salga el aroma pero antes de que cambie de color.
- Añadir una cebolla cortada y el tomate pelado y troceado (en lata pero prefiere usar tomates naturales), algunos piñones (el toque creativo de mi marido), sal y pimienta, moviendo la salsa ocasionalmente. la receta tradicional no incluye la cebolla, pero da un gusto un poco dulce y acompaña muy bien la salsa de tomate.
- Antes de los 15 minutos añadir la albahaca y las tiras de berenjena y quitar el sartén del fuego.
- Mientras se hace la salsa, cocinar la pasta al dente. Personalmente prefiero los spaghetti de grano duro, se encuentran en las tiendas de delicatesen italiano. Reservar .
- Añadir la pasta al sartén con un poco del agua de la pasta para diluir un la salsa de tomate y mover los ingredientes hasta que se mezclen.
- Servir inmediatamente.
- Espolvorea la ricotta salata al gusto y unas hojas de albahaca. Si no tienes ricotta, se puede poner parmesano reggiano aunque no sea el queso tradicional para esta receta.
Versión tradicional con ricotta y hojas de albahaca
Post actualizado el 7 de agosto 2020.
