Yoga style: ¿black&white o estampados?

10-07-2015

Desde hace unos unos años, con el revival de los 80’s y 90’s, volvemos a ver hombreras, uñas fucsias, talla alta de pantalones; el look de Madonna en Like a Virgin es casi conservador, y el bigote de Fred Mercury un detalle hip. Para los que no se acuerdan (porque nacieron después de 1995) Madonna iba de tutú y el cantante de Queen con su bigote y short de cuero.

Además de la vuelta del look Flash Dance o Fame con calentadores, vemos más colores ácidos y estampados en la ropa de deporte.

La moda del running  ha influenciado la ropa de deporte en general y también la ropa casual de calle. Ahora parece normal salir a la calle con bambas flash y unas mallas aunque no vayas al gimnasio, y la verdad es muy cómodo.

Yoga style

Por mi trabajo y mi practica casi diaria de yoga voy en mallas todos los días y me gusta cambiar de look según el humor del día, el tiempo y la temperatura.

En esta foto, comparto una selección de leggins estampados que me gustan  de las marcas Casall, Oysho, Bonh BCN, Lorna Janes.

 

Si no te gusta llevar colores, te propongo este look blanco y negro con estampados de flores. También puedes escoger el naranja suave. En China como en la India, el color naranja o llamado azafrán tiene un símbolo muy positivo y es considerado como auspicioso y sagrado, no se considera como un color llamativo como en el oeste.

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Todavía en España el yoga tiene una imagen de disciplina espiritual, con sus ritos y su estilo atemporal. No hace falta ir todo de blanco o coleccionar las prendas de color gris o negro para tener un look de yogi. El yogi no tiene un look concreto, sino que debe sentirse cómodo y ser honesto con sí mismo. Es verdad que la ropa llamativa puede dispersar la mente, pero más en el vestuario que en el studio de yoga. Durante tu practica debes llevar tu atención hacia dentro, en tu cuerpo y en tu respiración, verás que los colores ya no importan.

Muchas marcas de prendas de yoga han creado camisetas divertidas y las marcas de ropa de deporte se atreven cada vez más en proponer ropa de yoga con colores y estampados. Cuidado un leggin de fitness o de running no siempre vale para hacer yoga. Te explico cómo escoger una malla de yoga en otro post.

El look depende del gusto, y si no te atreves con el total look y conjunto estampado de color llamativo, se puede poner un detalle de color, en el sujetador por ejemplo. La goma de pelo no cuenta como detalle.

Dos ejemplos de tops negros con sujetador fucsia, una pincelada de fantasía en un estilo sobrio.

yoga-style   yoga-style

El yoga no es serio ni conservador, los miles de años de su filosofía y tradición no lo han convertido en algo aburrido. Un “fashion touch” no te quita la concentración, la dedicación en tu práctica.

El pantalón ancho o chandal no es necesariamente más cómodo (que unos jeans, eso sí) que unas mallas ajustadas; marcan más el cuerpo eso lo confeso pero es importante que te sientas cómoda. Si cada uno practicara yoga como se debe, no se debería fijar en tu look sino en su propia respiración y mantener la mente concentrada.

Si practicas un yoga dinámico, es muy cómodo llevar una mallas con tejido elástico y transpirable, sobre todo en verano cuando sudas más con el calor. También para el top, mejor una camiseta transpirable, ajustada un poco larga que cubra las lumbares. Tu camiseta de algodón comprada en tus últimas vacaciones en Tenerife acabará haciendo col roulé cuando estes cabeza abajo, ofreciendo una vista muy bonita a tu sujetador. Si realmente tu camiseta es muy cómoda pero ha pasado de moda para salir a la calle, úsala como pijama.

 

Y tú, ¿te has atrevido con el look camuflaje para el yoga o prefieres algo discreto? Comparte tu opinión en comentarios

 

Te propongo un look todo gris con un detalle naranja de la marca sueca Casall

yoga-casallFotos con vestuario de Casall, marca sueca de ropa técnica deportiva.
Gracias a Zentro Yoga para dejarnos su precioso espacio en Barcelona.
Xuan Lan

Xuan Lan es instructora de yoga y meditación mindfulness. Tiene formación en Vinyasa (200 h), Jivamukti (75 h), Dharma yoga (200 h), Intensivo de Ashtanga (50 h) y Yoga para trauma (20 h). Además, también ha estudiado Gestión del estrés y Regulación Emocional con Mindfulness en la UOC (Universidad Oberta de Catalunya).

Es autora de 3 libros: "Mi diario de yoga", "Yoga para mi bienestar" y "La buena hija vietnamita".

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