¿Por qué siempre celebrar un aniversario de boda o de relación con una cena intima romántica a dos? Y esperar el aniversario de plata o de oro para juntar los nietos y familiares cuando tu cuerpo ya no te permite hacer la fiesta hasta las tantas…
La felicidad de un matrimonio se comparte, al igual que una boda o un cumpleaños, es la ocasión de celebrar la felicidad con la gente que te rodeada, tu familia y los que quieres de corazón.
Es lo que hicimos con mi marido, escogimos el numero redondo de 10 años para reunir 100 amigos y familiares en un lugar romántico y bonito para renovar nuestros votos de boda de manera informal.
Sustituimos anillos por pulseras de goma, tan de moda con los niños este verano. Cambiamos la iglesia o ayuntamiento por una ceremonia informal delante del mar con una buena amiga, Veronica, como Master of Ceremony. Lo que no cambiamos fueron los testigos con sus discursos, y… mi vestido de boda Teresa Helbig que volví a ponerme 10 años más tarde para sorprender a mi marido. Entiendo que esta opción no vale para todas, si tu vestido acabó destrozado, o era de «otra época», mejor que te vayas de shopping…
Este tipo de fiesta es como una boda sin la tensión de la organización, ni la presión familiar de la boda, es mucho mejor. Es una gran fiesta que celebra el amor y la felicidad sin plan de mesa… pero con tus mejores amigos y tu familia.
Parece que hemos lanzado una nueva tendencia…
Os lo recomiendo, ¡os lo pasaréis bomba!
